Una y otra vez la misma foto en google que te hace acordar que estamos vivos.
Pero la imagen tiene una leve tendencia a desaparecer. Como los recuerdos.
Como que ya no tiene mucho sentido esperarnos otra vez. Sos el ayer.
Un día te preguntarás si ha sido tu decisión o el miedo que siempre te acompañó
a vivir la vida, a contraer las culpas, a pincharte con espinas para valorar la rosa.
Pero ya no estarán las respuestas, ni nos buscaremos, ni querremos saberlas.
El tiempo... es el enemigo de la juventud, pero también de los futuros inciertos.
Nunca nos despedimos, ya no tiene sentido hacerlo. Sin irnos ya no estamos.
Una foto... es todo lo que queda de una historia de amor
que tan intensa tiene sabor a inconclusa y nadie quiere continuar.
Pero la imagen tiene una leve tendencia a desaparecer. Como los recuerdos.
Como que ya no tiene mucho sentido esperarnos otra vez. Sos el ayer.
Un día te preguntarás si ha sido tu decisión o el miedo que siempre te acompañó
a vivir la vida, a contraer las culpas, a pincharte con espinas para valorar la rosa.
Pero ya no estarán las respuestas, ni nos buscaremos, ni querremos saberlas.
El tiempo... es el enemigo de la juventud, pero también de los futuros inciertos.
Nunca nos despedimos, ya no tiene sentido hacerlo. Sin irnos ya no estamos.
Una foto... es todo lo que queda de una historia de amor
que tan intensa tiene sabor a inconclusa y nadie quiere continuar.
Comentarios