El Falcon del Amor

Una vez más nos volvemos a encontrar invadiendo los sueños uno del otro, tele trasportando nuestras almas materializando el deseo entre besos y actos sexuales que no fueron pero que florecieron. Y florecen también las heridas al despertar. Y escribimos versos, los míos por Twitter, los tuyos entre silencios. Todavía caen lágrimas de tus ojos por morderte el amor como quien se muerde los labios. Estabas tan bonita, estaba tan bonito, estábamos tan bonitos. 2382 noches después de aquel día donde nuestros cuerpos se encontraron por última vez, donde se despidieron sin saberlo, casi sin querer queriendo, y yo te sigo soñando, convencido de que vos me seguís soñando. Y que en tus sueños como en los míos nos amamos hasta poseernos por completo, nos amamos de esa forma en la que se aman nuestros cuerpos simples pero que nuestras mentes retorcidas no pudieron permitirse. Dejaría todo por vos, y sin embargo no podría dejar ni mi mujer ni el cigarrillo. Pero en los sueños... en los sueños te