Llegué hasta acá (Carta abierta)

Llegué hasta acá, 46. Aldo, Javier, Argentino y Baccaro, con gran parte de la mitad Imbriano. Padre de 3 hijos hermosos, estremecen de lo hermosos, el más grande mayor de edad. Me acompaña hace 10 años, alguito más, una mujer de 5 letras, laburante, incondicional, re mamá, a veces, incluso, me hace y le hago y hacemos el amor como anoche, tremendas tetas y un hermoso culo. Se ve que, todavía y a pesar de todo, le parezco atractivo. “La Leona” le llamo a esa que además es hoy mi mejor amiga. Fui adolescente, me emborraché… mucho, la rockié… mucho, más de la cuenta de ambas cosas y- qué hablar- de la comida. Fui joven y también me emborraché… y la rockié en cantidades excesivas, y la comida. Sexo mucho, no fue solo la primera vez cuando no se me paró ni cuando eyaculé demasiado rápido, con muchas chicas, no recuerdo chicos, y sobre todo conmigo mismo. ¿Drogas? Bastante, pero no tanto, sinceramente no tanto. Viajé y conocí París, Londres y Nueva York, La Normandía, me crie en Buenos Aires. Recorrí la Ruta 40, dos veces fui al norte y dos veces al sur. Estuve en el mar, la ciudad, la montaña, en el campo dormí bajo las estrellas y acampé bajo la lluvia. San Clemente, Pinamar, Miramar, Mar del Plata, Saint Tropez, Las Toninas, Santa Clara, Las Grutas, Bariloche, Lousane, Amsterdam, Miami, Chicago, Santa Fé, Rosario… Salta La Más Linda. Anduve por muchos caminos, senderos, rutas, ríos, en casi todo lo que tenga ruedas y a pata, en barco, velero, bote y en avión… en patineta también, obvio, y arriba de una tabla de surf. Soñé alguna vez con ser un personaje de Break Point, practiqué algún que otro deporte extremo, James Bond… obvio y Misión Imposible, Rambo y Top Gun también, Lobo Del Aire. Me divertí, me lastimé, rompí alguna vez algún corazón y varias rompieron el mío, otras me lo rompí yo solito, acá está, en mi pecho el mío corazón, aun funciona, no sé si requeté bien, pero funciona. Amo las buenas costumbres, más no siempre soy bien acostumbrado, me puede “el buen vivir”, pero no siempre vivo bien, a veces mucho y muy rápido me pega mal… y muchas veces fui mucho y muy rápido y me la pegué mal. Saludo, siempre, digo buen día, buenas tardes, buenas noches, pido por favor y doy las gracias, abro puertas, dejo pasar, no crean nunca que no sé ni me gusta escuchar. Odio las historias mil veces repetidas, no saben cuantas creen que no pero ya me las han contado con alguna que otra edición o derecho de relato, amo las nuevas. Me agarré de pibe a trompadas, varias veces, y de no tan pibe me cagaron bien a trompadas. Vi de frente una pistola disparar su bala, alguna vez disparé yo también, pero frente a nadie, pura botella. Conocí el adentro de un calabozo, acá, sí, estuve preso. Y también, casi, una vez, en Europa, fui a Suiza en el TGV y me arrestaron en el vagón comedor… una locura, terrible anécdota. Fui a la universidad, egresé como licenciado en Periodismo y comunicaciones. Trabajé en el gobierno, en educación, en espectáculos y gastronomía. Estuve en Cromagnon, no me la cuenten. Fui dueño de un bar, de dos, de trés y de cuatro, casi de cinco (si la 5ta es la vencida- como la de Messi- será mundial). Fui manager de una banda de rock, de dos. Planté un arbol, dos. Escribí un libro, por ahora uno solo… estoy en eso, denme tiempo. Saludé personalmente a un Rolling Stones. Vi a mi equipo de futbol salir campeón, en la cancha, abrazado a mi hijo el más grande, conteniendo las lágrimas hasta que no pude contenerlas. ¡Vamó Vamó River Plate!… Jugué al fútbol en el Monumental, dos veces… ¡epa! Gran barrida de cabeza y una más cuando era chiquitito. Soy un servidor, profesional, nada me gusta más que agasajar a las personas. Amo mi trabajo, amo que me paguen por hacerlo, soy muy bueno y me gusta serlo, serlo y hacerlo, pero más amo disfrutar del camino. No creo estar de vuelta, por eso este año arranqué- sí, a mis 46- la carrera de cocinero profesional. No creo estar de salida, no creo haber sido, no soy ex, soy todo lo que soy y lo que llevo a cuestas. No creo que sea poco, ni mucho, es… Soy Aldo, El licenciado, El Tío, Papi, hermano, amigo, amiguero, ex fumador con multiples y crónicas recaidas, boludo (Casi profesional en eso tambien), hablador, casi siempre por demás, mal guitarrista, austero y limitado cantautor, querendón, confianzudo, honesto, primo y padrino, soy hijo, asador dominguero, profesor, barman, bartender, bar fan, casi que soy una barra, sin dudas despachante de magia, por no decir más de alcohol que de pan. Salí en la tele, hablé en la radio, escribí en el diario, me falta el cine… creo, por ahora ni filmar ni ser filmado ¿Actor? Artista. Soy buena persona, la más buena que conozco… y conozco muchas personas, muchas. Tengo muchos amigos, algunos con buena, otros con mucha y otros con mala fama, si me obligan a nombrar algunos con los dedos de una mano nombro a Alejandro, Lombriz, El Tano, Valeria y a La Poro; y lo puedo hacer porque todos los que se ofenderían por no ser nombrados también los nombrarían. Pero, creanmé, no me alcanzan los dedos ni de muchas manos para nombrar a mis amigos… aunque cada vez nos instagramiemos más y nos veamos poco. Uff, que ganas de nombrarlos a todos, pero estaría siendo ostentoso, y en el fondo, muy en el fondo, elijo ser humilde. Hoy tengo ganas de abrazarlos, comer un asado, tomarnos unos vinos, contarnos cosas, reir, sin llorar y volvernos a abrazar. La música siempre ha sido y es parte de mi vida, pero no soy muy fan de La Triple T, señal de que me estoy viniendo viejo, lo sé. Llegué hasta acá, 46… 46 y medio… hago una escala, una parada técnica a mitad de camino, miro para atrás, miro a los costados, seguimos para adelante con la vista al frente, si llego a los 92 sin dudas me retiro. Soy un Roanroler- perdón amigo Rocketsound- pero yo… soy un auténtico roanroler. #AJB Memorias de un Roanroler.