4 niños murieron en un incendio

El viernes a la noche 4 chicos de 3, 5, 7 y 13 años murieron en un incendio cerca de mi casa. En la "Villa 9 de Julio". Los padres (de nacionalidad Boliviana) estaban en una fiesta.
Mi primer sentimiento fue indignación por los padres, que quedaron detenidos... "ojalá que los dejen presos"... pero lentamente fui cayendo en cuenta de que me podría haber pasado a mi. Claro que nunca me iría de fiesta y dejaría a mis hijos solos en casa. Pero más de una vez, por razones de trabajo, queda mi nena al cuidado de mi hijo mayor por un par de horas entre que yo voy y llega mi mujer. "Es distinto, es por trabajo, es un ratito"... es igual de peligroso.
Mi tercer sentimiento al respecto fue también de indignación. Pero esta vez para conmigo mismo. ¿Cómo pude haber pretendido condenar a dos padres que acababan de perder a sus hijos en un incendio? ¿Cómo pude ser tan hipócrita, o tan pelotudo? ¿Qué me dió derecho a mi siquiera a opinar al respecto, qué fueran de nacionalidad Boliviana, qué vivieran en una "villa", qué? Soy incapaz de imaginarme a mis hijos muriendo en un incendio, no creo que pudiera sobrevivirlo. Entonces... por qué asumí que a esos dos padres- quienes deben estar hechos diarrea- se los podía juzgar... 
Mi única explicación es que vivimos, vivo, situaciones a diario que me van convirtiendo en una persona menos solidaria. Vivimos indignados, señalando, enojados y nos cuesta mucho cuestionarnos a nosotros mismos. Alguien podría pensar- con cierta razón- "Qué culpa tengo yo de que dos bolivianos que viven en una villa se vayan de joda y dejen a sus hijos encerrados" y también podría pensar tranquilamente que esas cosas a "uno" no le pasan; creer-incluso- que esas cosas le pasan a "esta" gente que vive en viviendas "precarias". Bueno, yo creo que tenemos, tengo, por un lado una responsabilidad social de la cual hacerme cargo. Creo por otro lado que debo- mínimo- tomar nota, conciencia, y... aunque sea por las dudas, tomar los recaudos para que esta situación no pueda suceder en mi casa. Porque sí, me podría haber pasado a mi.

Sería bueno que podamos todos reflexionar sobre esto. 4 chiquitos murieron quemados en un incendio a cuadras de mi casa, a cuadras de los que vivimos en Ballester Oeste, y nuestra primer reacción antes de la angustia fue de indignación e indiferencia ( y es notablemente llamativo el nivel de indignación que puede provocarnos algo que a su vez nos resulta indiferente "Esas cosas no nos pasan a nosotros"). Chorreamos intolerancia.
Cuidemos a nuestros chicos, nada es más importante, seamos más solidarios y menos prejuiciosos.
Aldo.

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